Existen determinadas culturas de pensamiento y actitud respecto a la forma en que las personas, y especialmente los niños, deben funcionar.
Aquellos que no funcionan de acuerdo a las reglas y regulaciones establecidas a su alrededor son etiquetados de “discapacitados”, especialmente en las comunidades educativa y médica.
A menudo se llega a la conclusión de que a los niños que no “encajan” hay que enseñarles a comportarse para que aprendan a funcionar como si fueran “normales” y “promedio” e iguales a los demás. El problema es que no son normales ni promedio .Qué tal si al pedirles que sean normales y promedio, estamos:
Está surgiendo evidencia de que las personas etiquetadas pueden tener ciertas habilidades, hasta brillantes, que pueden pasar desapercibidas o incluso ocultarse durante años.
Te invito a descubrir una perspectiva diferente respecto a niños con TDA, TDAH, TOC y AUTISMO.